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Por cierto, todas las imágenes, exceptuando mi careto que es el que mi madre me dio en su día, han sido sustraídas y robadas del mundo virtual de modo legal, por lo menos eso es lo que afirmaré delante del juez.
Es broma.
Si alguna de ellas tuviera copy raid y casualmente eres el propietario de tal derecho y de la imagen, por ahí abajo está mi correo, me lo dices, te la devuelvo, y tan amigos.

Por otro lado, todos los textos de este blog son míos, si apareciera la pluma de otro, lo haría con su firma. Siempre.
Si te llevas alguno, cita y enlaza, no me importa que compartas, pero que yo no me entere de que te lo has apropiado.
Internet es un pañuelo.


LIVERTAD. Jamás me obligareis a escribirlo con B

17 marzo 2010

gazmoñas.


Fingimiento de cualidades o sentimientos contrarios a los que verdaderamente se tienen o experimentan, eso, es lo que dice el DRAE si buscas la palabra hipocresía.

De los sinónimos que conozco en relación a la palabra, uno de los que más me gustan, es el de fariseísmo; claro que el de gazmoñería, y este con diferencia, tampoco tiene desperdicio, y creo que a partir de este momento, es el que voy a utilizar: eres un gazmoñas.

Un gazmoñas ¿nace? ¿O se hace? Cómo hoy no siento inspiración suficiente para debatirme y rebatirme semejante cuestión, -que supera con creces mi estado mental inconexo- me dedicaré a otros menesteres, tales como verter mi siempre, sucia y lasciva opinión, sobre los empleados, asalariados o no, en todo caso afiliados, a la gazmoña.

Y es que si existe algo que realmente no soporte en este tipo de gente, o gentuza, -si los unes, turbamulta- es la jodida naturalidad con la que caminan por la vida, aunque supongo, de eso precisamente, es de lo que se trata.

Por separado no tienen desperdicio, y qué nocivos pueden llegar a ser los muy cabrones, -y me disculpe el macho cabrío por la afrenta de la comparación- vienen, se instalan y se acabó.

Y si algo no te cuadra y, muy educadamente te cagas en su puta madre, por un poner, -siempre quedan sus muertos- invariablemente quedas mal. Esto es un axioma, algo más que un por supuesto, porque el gazmoña, sonríe siempre, a todo el mundo, en todas direcciones y haga el tiempo que haga.

Y hay quien se lo cree.

jódete y baila.

Hecha la ley hecha la trampa, y con gazmoña al uso, ha de haber un gilí que lo alimente, si no, de qué. Curiosamente, la defenestración aquí sirve de poco, no existe modo alguno de bajarlos de la burra, son así y ya está, igual que yo soy asao y el otro, tal cual.

Me gustaría poder divulgar algún tipo de consejo sobre como se ha de actuar, en el supuesto de que topéis con alguno, pero creo que lo más adecuado siempre, es la improvisación, si se tercia y si se puede, se le alecciona, si no ha lugar se le ahostia o se le ignora, dependiendo del momento y circunstancia.

Aunque yo, he de reconocer, que siempre improviso del mismo modo y escupo culebras por esta boca que diox, tuvo a bien colocarme bajo la nariz, y esta a su vez, debajo de los ojos.

Para poder olerlos primero y verlos venir después y así ir preparando en que orden y bajo que disciplina, me voy a ir acordando de su familia.

La política incluida.



4 comentarios:

Incierto dijo...

Bueno. Aunque es ya tarde, tengo algo que decir al respecto (aprovechando mi obligado post en la entrada anterior). No es ello muy novedoso, la verdad, pero viene al pelo:

"Dios los cría y ellos se juntan"

Y si consideramos ese "se juntan", en amplitud, como un "permanecen juntos una vez se ha revelado su naturaleza farsante", no creo yo que los farisáicos gazmoños sean algo de qué preocuparse.

El tiempo, que es suficiente enemigo, tiende a ponerlos en su sitio. Más que nada, porque resultan ser gente poco interesante. En esencia, digo. Y acaban aburriendo hasta al más distraído.

Pero, como siempre, cada cual según su afán. De todo ha de haber o los anuncios de TV serían innecesarios (crisis global garantizada).

Saludocordios.

aspid dijo...

uuuuuuuuuum ¿has visto inci? !GAZMOÑO! qué palabra tan sonora, que bonita, de aquellas que tiene vida propia.
la he adoptado, me la quedo, me gusta.

pero no, no te creas, el tiempo, no siempre los pone en su lugar, o por lo menos, no en todos los lugares, los hay con carisma tío.
IM-PRE-SIO-NAN-TE.
pero haberlos haylos.

fraterbesos.

Incierto dijo...

Ah. Que goce cargarse las pilas ausentándose siquiera unos días de lo habitual, afirmo. Siendo esta mi circunstancia, continuaré mi relajación dejando que "Dune" hable por mi:

"El primer paso para evitar una trampa es... conocer su existencia".

No es pensaniento baladí. ¿Verdad? Entonces, será que no estorba el gazmoño que quiere, sino el inadvertido.

Y ya. Basta de ¿acertijos? por hoy. Para algun@s, digo yo, son puro cristal ... y por eso merece la pena la asistencia a sus blogs.

Saludocordios.

PD: El carisma se lo puedo reconocer, digamos, a algún líder de masas. Pero a los gazmoños sólo les aprecio un mimetismo protector. No obstante, esta teoría da para varios folios y no es caso ahora.

aspid dijo...

el gazmoño mimético que me inspiró la entrada, te queda más cerca a ti que a mí, y con este sólo, llenas folios enteros, varios, si te inspiras en sus plataformas auditivas ¿acertijo?
que va, y teoría tampoco.


Esto no tiene título es simplemente lo que hay. Estoy remontando el vuelo y existen días mejores y otros más hijos de puta, pero no me he rendido y no voy a hacerlo tampoco, principalmente por que no me da la gana y por que aún me queda sangre.
A partir de aquí y por este motivo se puede leer cualquier cosa, algo que también me la suda bastante, es mi blog y es el espejo, es tan simple como reflejarse o no, si te quedas o te vas no es culpa mía, ni tuya, quizá nos parezcamos más de culo que de frente, en todo caso la puerta no tiene llave, no cierres al entrar y no des un portazo al marcharte.

licencia

Todo lo que hay en mi casa es propiedad mía, los textos sin firmar son de mi puño y letra, las obras firmadas pertenecen a sus autores y así constará en todo caso, todas las poesías de “el silencio del espejo” me pertenecen a mí.
Recuerdalo.
Un abrazo y muchas gracias por tu visita.
ah! la licencia real, anda por ahí abajo, es que la informática y yo no nos ponemos de acuerdo prácticamente en nada y esta vez, se ha empecinado en no querer subirme la imagen hasta aqui.
Ella misma, no pienso olvidarme de esto...
En fin...
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